En medio de la cuarentena obligatoria, empleados de la Municipalidad de Córdoba realizaron una nueva protestas en las calles de la Capital en rechazo a la reducción de jornada impulsada por el intendente Martín Llaryora y la reforma previsional que implementó el gobierno provincial de Juan Schiaretti.
Con barbijos, caretas y tapabocas, la marcha que convocó a los empleados municipales y avanzó hacia el Palacio 6 de Julio, la sede del gobierno. También se planteó el rechazo a las contrataciones de los promotores de convivencia lanzados por Llaryora.
“Repudiamos la contratación de 48 monotributistas que han ingresado a la repartición”, expresó el sindicato en un comunicado.
En tanto, la referente de Educación, Susana Rins, indicó que cada repartición plantea a su vez una serie de reclamos particulares en la marcha.
“En Educación, no hay actos públicos virtuales, se ha desmantelado la seguridad de las escuelas y porque tenemos compañeros afectados por el recorte, pese a que dicen que el recorte no afecta a educación ni salud”, indicó a La Voz del Interior.
“El reclamo está vinculado con la sanción de una ordenanza que vulnera nuestro estatuto y con una reforma previsional que está ligada absolutamente al salario”, dijo respecto a las medidas implementadas tanto a nivel municipal como provincial.
La ruidosa manifestación llegó hasta el Palacio 6 de Julio, vallado y con un fuerte cordón policial de seguridad. Cabe recordar que miembros del Suoem ya fueron imputados con anterioridad por violar la cuarentena.
En la marcha se produjo un altercado con periodistas. Daniela Abrudsky, movilera de Canal 12, reportó que desde las columnas arrojaron piedras contra el personal de la prensa que estaba trabajando en el sector.