De los nuevos empleados del Programa de Atención Medica Integral, 195 corresponden a Direcciones, Gerencias y Jefatura de Gabinete.

Mientras Argentina hace malabares para minimizar los efectos de la tercera ola del coronavirus, el sistema jubilatorio deja mucho que desear para sus beneficiarios, en cuanto a los ingresos y prestaciones en general; a pesar que el PAMI sigue creciendo en su planta de empleados. El organismo que conduce Luana Volnovich designó a 470 personas que desempeñarán tareas en el Instituto, con un régimen laboral de 35 horas semanales.
El 27 de diciembre el PAMI comunicó oficialmente los nombramientos. De los nominados para trabajar en el organismo Nacional, 195 nombramientos corresponden a Direcciones, Gerencias y Jefatura de Gabinete, lo que implica sueldos muy por encima del promedio.
Los recientes desigandos trabajadores estatales, tienen 30 días para presentar su título secundario y certificado de ausencia de antecedentes penales emitido por el Ministerio de Justicia de la Nación.
LAS 5 PRIMERAS HOJAS, DE UN LISTADO DE 36




De acuerdo a la resolución, la designación responde a “la necesidad de adecuar la estructura organizativa del Instituto, de manera tal de reordenar el flujo de responsabilidades y unidades organizativas, con el propósito de atender de manera dinámica y eficiente los objetivos del servicio y gestión que imponen las normas que regulan su accionar”.
Antecedente polémico:
Habian pasado solo tres días, desde que las nuevas autoridades arribaron al PAMI de la mano de la dirigente kirchnerista Luana Volnovich (pareja de Máximo Kirchner), para que se comenzaran a dar los primeros cambios.
A través de la Resolución Nº 2000, publicada en la pagina web del PAMI, la flamante directora del organismo designó como gerente de la entidad a su hermano.
De este modo la ahora ex-diputada resolvió “asignar funciones de titular de la Gerencia de Comunicación y Relaciones Institucionales, dependiente de la Dirección Ejecutiva, al señor Guido Emanuel Volnovich“, dice el párrafo principal de la normativa de resolución.
Fuente: El Disenso