Adhemar Bacchiani era el titular de Adhemar Capital con sucursales en Catamarca, Tucumán, Córdoba.
Durante cuatro años se dedicó a acumular riqueza de manera exponencial en Catamarca. Con el tiempo decidió extender su negocio en Tucumán y en Córdoba. Cuando se preparaba para desembarcar en Buenos Aires empezó el declive hasta que el viernes terminó preso por la Justicia Federal de Catamarca. La causa es por supuesta estafa a ahorristas que depositaban pesos y dólares que, en teoría, él invertía en criptomonedas y pagaba jugosos intereses; pero sus detractores denuncian que se trataba de una estafa piramidal.
Dos móviles de Gendarmería fueron a buscarlo a su casa después de que la Justicia Federal de esa provincia ordenara su detención, la de su su socio José Blas y de otros dos imputados. Son los responsables de Adhemar Capital, la compañía denunciada en la Justicia en Córdoba, Tucumán y Catamarca por supuesta estafa a inversores que entregaban su dinero para que fuera invertido en criptomonedas y, a cambio, le ofrecían tasas de interés que llegaban al 50% anual.
Bacchiani estuvo internado en una clínica privada de Catamarca esta semana y en la puerta hubo manifestaciones de supuestos damnificados por el accionar de su empresa. El miércoles pasado la Justicia Federal de esa provincia lo imputó por “asociación ilícita, lavado de activos, defraudación y de intermediación financiera no autorizada”.
En la mañana de este viernes algunos ahorristas llegaron a la casa de Adhemar en barrio Pueblo Chico para ver cuando los oficiales de Gendarmería lo buscaban al empresario. Insistieron en que lo que quieren es “cobrar” y testimoniaron ante el medio catamarqueño El Esquiú que los “obligaron a reestructurar”. “No daban opción; retenían los cheques”, describieron.
Ayer los fiscales federales Vehils Ruiz y Santos Reynoso pidieron su detención y la de Blas; el abogado tucumano Alfredo Aydar hizo la presentación en ese sentido. El juez federal Miguel Ángel Contreras ordenó la medida.
El defensor de Bacchiani señaló a radio Valle Viejo: “Todavía no hemos recibido ninguna notificación. Entendemos que la detención sería inminente. Mi cliente me dijo que está trabajando para dar cumplimiento con todas las obligaciones de los inversores y que va a seguir haciendo eso para que todos puedan recuperar su dinero”.
Planteó que fueron “factores internos y externos en la empresa que afectaron los pagos y que en los próximos días estará devolviendo los capitales de las inversiones que se hicieron en el mes de enero”. Bacchiani ya había dicho eso a este diario, cuando indicó que le habían bloqueado las cuentas.
En enero el Banco Central le solicitó a la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) que investigue a la firma Adhemar Capital S.R.L. por la posibilidad de que esté desarrollando una estafa piramidal bajo la fachada de supuestas inversiones en criptomonedas.
El pedido se originó en una denuncia de los gobernadores de Catamarca, Raúl Jalil (uno de sus hermanos tiene dinero en Adhemar), y de La Rioja, Ricardo Quintela, quienes alertaron en setiembre pasado por la actividad de una serie de empresas no financieras instaladas en esa provincia, que se estaban dedicando a captar fondos cuyo destino sería la inversión en el mercado de criptomonedas asegurando ganancias mensuales que superaban ampliamente a las del mercado oficial. Anoche hubo manifestaciones de ahorristas frente a la casa de Jalil.
La firma operaba, según explica en sus redes sociales, con criptomonedas, y a quienes colocaban dinero les ofrecía tasas de entre 12% y 22% mensual y, dependiendo del monto, podía llegar al 50%.