SAN MIGUEL DE TUCUMAN.- La definición de las listas de diputados y senadores del oficialismo que competirán en las próximas elecciones promete ser el nuevo foco de tensión entre el gobernador Juan Manzur y el vicegobernador, Osvaldo Jaldo.
El diputado nacional Carlos Cisneros, aliado de Manzur, le marcó la cancha al jaldismo, en una entrevista en el programa “De Primera Mano”, que se emite por Radio Q. Además, remarcó que el vicegobernador está mal rodeado por “salieris” de Jaldo que son modelo 2007 en el peronismo.
El lunes, Manzur anunció el financiamiento de proyectos para las 93 comunas rurales de la provincia, con fondos nacionales y de la Caja Popular de la provincia. Fue un acto de demostración de fuerza dentro del peronismo local.
“En los gobiernos hay un gobernador, quienes lo seguimos somos colaboradores, ayudamos, aportamos. Creo que hubo una suerte de confusión que el Poder Ejecutivo, en este último tiempo, es un loteo donde se reparten los espacios. Hay un gobernador que es el presidente del PJ tucumano, vicepresidente del PJ nacional que es el que genera y gestiona las obras. Siempre me ha sorprendido la capacidad de gestión y vínculos políticos, empresariales que tiene Manzur en Buenos Aires”, sostuvo.
El parlamentario agregó que se adelantaron los tiempos políticos por la sucesión tucumana. “Creo que cuando se confunden o queman etapas o se interpretan mal los tiempos políticos se cometen errores. Los que pretenden disputar poder del 2023 en 2021, en medio de la pandemia, es apresurado y torpe. Se tienen que generar consensos para salir adelante”, dijo.
Cisneros admitió que hasta marzo el candidato natural para suceder a Manzur era Osvaldo Jaldo. “El candidato indiscutido para la mayoría de los peronistas era Osvaldo Jaldo, por mérito y capacidad. Hoy no pienso lo mismo”, reconoció.
“Quien conduce y armará la lista es el presidente del PJ, Juan Manzur. Así como Fernando Riera eligió a (José) Domato, (Julio) Miranda eligió a (José) Alperovich, se equivocó, pero Alperovich lo eligió a Manzur, Manzur buscará como presidente del PJ quien encabece la fórmula en 2023 y en quien confía y quien no”.
Fiel a su vehemencia, Cisneros cuestionó a los legisladores que responden al vicegobernador. “Quienes no vienen del PJ se toman atribuciones y desde la Legislatura descalifican al gobernador Manzur y creo que le hace mal a la gestión del vicegobernador Osvaldo Jaldo y a la imagen de legislatura. No entienden la lógica del peronismo, porque no viene del peronismo y no la van a entender nunca”, dijo en referencia a Javier Morof, uno de las espadas de Jaldo en la Legislatura que dejó de ser el apoderado de Antonio Bussi y saltó al peronismo de la mano del ex gobernador José Alperovich.
“Pero tampoco le quiero quitar responsabilidad a Jaldo. Todos sabemos cómo funciona la legislatura, si Osvaldo les dice miren muchachos quiero tener un acercamiento con el Gobierno, quiero trabajar para las elecciones de octubre, sabemos cómo se encuadran las cosas en un poder como el Legislativo. A veces pueden ser satélites, salieris de Jaldo que salen y opinan cualquier cosa, y a veces ya de muy obsecuentes lo hacen con alguna perspectiva o temor sabiendo que en el PJ no tienen retorno y entonces salen a dinamitar los puentes de contactos con el gobernador”, sostuvo Cisneros.
Otro de los puntos en conflicto es el resultado que pueda tener la interpelación al ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer. Cisneros recordó el pacto entre el jaldismo con sectores del radicalismo y de Fuerza Republicana para que el funcionario de Manzur diera explicaciones en el recinto. “Siempre están buscando llevar al banquillo a los ministros”, denunció.
“Es fácil ser opositor. Porque haces una declaración te quedas ahí, lo difícil es ser oficialista y defender la gestión. Las críticas hay que hacerlas adentro. No digo a todo que sí cuando converso con funcionarios o con el gobernador. Tengo una mirada propia y coherente, no se lo voy a decir a través de los medios, lo planteo donde tengo que plantear”, diferenció.
“Para mi el único peronista de ese grupo es Jaldo, los que entraron con partidos satélites, que se abrió la tranquera con Alperovich, saltaban de un partido a otro, fue la mercantilización de la política desde 2003 al 2015”, dijo.
“En este momento de pandemia todos tenemos que tener grandeza para afrontar este drama que tiene Tucumán y el mundo. Si por un lado se busca acercamiento y después los salieris salen a descalificar al gobernador y a sus ministros, creo que se torna difícil. Hay que tener un solo discurso. Me encantaría que existiese un acercamiento sincero y no que se dinamiten los puentes. A la gente le cansan las peleas”, reflexionó.
“Jaldo no dudo que juegue, fue concejal, intendente, interventor de la Caja, ministro de Economía, ministro del Interior. Los que lo rodean, que no son peronistas, o que son peronistas modelo 2007, lo dudo, dudo de los que están alrededor de él. En el peronismo hay una puerta grande para recibir y una puerta grande para irse. Jaldo es peronista, no tengo duda que va a trabajar. Los que van dinamitado, por esa gente no puedo responder”.
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